EL AS CON EL QUE CRISTINA KIRCHNER ESPERA A MAURICIO MACRI

DIÁLOGO PARA EVITAR LA GUERRA

El laberinto político por el cual transita la Argentina no encuentra una salida ordenada pero como en todo laberinto hay una sola manera de salir (políticamente) qué es por arriba, para ello se necesita paciencia y sobre todo mucho razonamiento.

Son varios los interrogantes que nos podemos hacer: ¿Falló la custodia? ¿Qué hubiese sucedido si la bala que no salió, hubiese salido?

En la última semana, fueron constantes los mensajeros políticos entre el Frente de Todos y el Pro para generar un cónclave entre Cristina Kirchner y Mauricio Macri. Pero es necesario retroceder, por lo menos un poco, para poder entender la necesidad e importancia de esta reunión. 

La ruptura del pacto de no violencia política que se había establecido de manera unánime desde 1983, con la recuperación de la democracia, mueve el mapa político. Dejando al país a un paso de un violento conflicto civil sin precedentes en nuestra historia. 

El Presidente Alberto Fernandez, de manera culposa (por negligencia o imprudencia) o dolosa, no siguió los pasos de su alma mater el Presidenta Ricardo Alfonsín. Perdió la posibilidad, una vez más, de convocar a todas las fuerzas políticas, generando un nuevo consenso democratico propio del siglo XXI. ¿Será porque no pudo o porque no quiso? Alberto eligió otro camino, por cadena nacional (grabada) fustigó a la justicia, a los partidos opositores y a los medios de comunicación. Los cuales, salvo algunas excepciones, se habían encolumnado en solidaridad con la Vicepresidenta. Al otro día fue feriado, ¿el Presidente no se atrevía a otro 17 de octubre, del cuál no sería protagonista? Ni propios ni ajenos podían permitir que la vicepresidenta se posicionará por encima de toda la clase política. 

Si hay alguien que sabe manejar los tiempos, los discursos y sobre todo los silencios es Cristina Kirchner. Después de tres semanas decidió que su primera aparición pública fuese en el Senado de la Nación, epicentro de su poder, pero particularmente con parte de Iglesia Católica que tienen una labor social. La vicepresidenta utilizó el escenario para dejar en claro que ella ya había sido presidenta dos veces, que su única y actual ambición era que la sociedad pueda vivir mejor. 

La bandera de tregua la levantó Cristina. En la mayoría de los casos, para no decir todos, lo hacen quienes están en una situación de debilidad. Pero las dos veces Presidenta, escapa de todo manual y estrategia presideseñada, la situación es totalmente distinta. Luego de la imputación del Fiscal Luciani, el kirchnerismo empezó a recuperar la capacidad de movilización y con la asunción de Sergio Massa, la estabilidad económica del país. 

Cristina Kirchner tiene la gran capacidad de ser el foco de toda discusión en la política argentina, en los medios de comunicación y en el poder judicial. Luego del intento de asesinato sobre su persona, su posición para avanzar políticamente se vio fortalecida para afuera e industible para adentro; la decisión pasaba una vez más por dos grandes senderos: el tiempo o la sangre. Y la líder del peronismo optó por la misma opción que tomó el fundador de su partido, Juan Domingo Perón, que es el tiempo. 

Los sótanos de la democracia, que tanto habló el Presidente de la Nación y luego de cien días de gobierno y varias reformas judiciales fracasadas, siguen muy fortalecidos.

Los servicios de inteligencia que responden a la orgánica institucional, actúan a posteriori de lo sucedido. La mejor prueba para poder referenciar el accionar, es con el caso del Fiscal Nisman. 

Hay algunos hechos que son bastante claros para poder esclarecer la situación:

- Sabag Montiel no es un lobo suelto, es parte de un grupo extremista que tenía como determinación asesinar a Cristina Kirchner y luego a Alberto Fernández. 

- La militancia qué rodeaba a Cristina Kirchner impidió el atentado. Ya que el fracasado asesino "se había olvidado de poner la bala en la recámara"

- La banda de “los copitos”, es el paragüa que encubre una verdadera asociación para cometer delitos políticos, ya sea generar caos con bombas molotov o de asesinar a la vicepresidenta. Podríamos hablar de una célula terrorista. Hasta planearon alquilar un departamento enfrente de la casa de Cristina Kirchner ¿Quien lo iba a pagar?. Se paseaban por los canales de noticias, hablando desde planes sociales hasta para despegarse del hecho. ¿Qué grupo o quienes se permiten tal exposición?

- La vecina de Cristina Kirchner, de apellido ilustre en los servicios de inteligencia, empieza a tener una muy buena relación con la militancia.

- Tanto el Dr. Dalbon como el Dr. Ubeira apuntaron directamente a la financiación de grupos políticos con ideas extremistas (Revolución Federal y Noción de Despojados). Lo importante aquí es ¿Quien financia estas organizaciones? Lo que indica las investigaciones es que el primer grupo, habría recibido transferencias considerables de parte de un grupo empresarial que pertenece a Nicolás Caputo (hermano de la vida y socio económico de Maurio Macri) 

- Los profesionales que defienden a los detenidos y procesados, cuyos honorarios son en dólares, escapan de toda lógica posible de financiación por parte de un grupo que vendía algodones de azúcar. Acá para ejemplificar es bastante fácil, el Dr. Gastón Marano que era asesor hace unos días de un senador por la provincia de Chubut, Ignacio Torres, que pertenece a JXC en la comisión bicameral que vigila a los organismos de seguridad e inteligencia, es decir otra vez los sótanos de la democracia.

La pregunta final que nos podemos hacer es ¿Quién está detrás del plan para asesinar a Cristina Kirchner? Pensar que Sabag Montiel y Uliarte son el unico eslabón de responsabilidad sería muy básico, usar de carnada grupos extremistas es muy común. Alguien los manipulo, los financió, les preparó el escenario, los blindo mediáticamente y luego les soltó la mano. Hasta podríamos hacer una paralelismo con las conocidas llamadas del Fiscal Nisman a Patricia Bullrich, Alonso y compañía sin respuesta alguna por parte de las mismas, el día antes de la presentación de la denuncia contra Cristina Kirchner en el Congreso situación que no se dio por el fatídico fallecimiento del Fiscal.

Una vez más un arma de fuego, que quien la ejecuta no es el dueño. ¿Quien es el verdadero dueño del arma? ¿Porque Sabag Montiel cambio el arma que le habían dado para usar? ¿Porque alguien que sabía cómo preparar una arma para disparar, no la llevó lista para hacerlo de manera inmediata? ¿Hay una nueva mano de obra desocupada, capaz de generar miedo en la sociedad? Los sótanos de la democracia, están más fuertes que nunca y con un despliegue formidable. 

Cristina Kirchner ya sabe estos interrogantes, pero lo más determinante es que seguramente sabe las respuestas. Y con toda esa información sobre la mesa, té de por medio, lo espera al ex Presidente Mauricio Macri. Y como dijo ella: su ambición ya no es personal, solo quiere paz.